17 de agosto de 2009

Hermes

Es inherente en mí, no puedo evitarlo. Es poco probable que alguna vez deje de desenvolverme entre magos. Donde mi papel es mas como el de un humilde mensajero.

Y recuerden que faltan catorce días a partir de ahora.

Te traes agradecimientos invisibles para el Maestro Barneyy tragicomedias sardónicas para el deleite del Maestro de Luna.

Te quiere

Mamá

2 comentarios:

Celestina Tercioipelo dijo...

Guau, ser mensajero de magos (lo que implica conocer algunos de sus secretos)... Yo quiero.

Besos, guapo.

;)

csar.soto dijo...

mensajeria que importancia =)
saludos